El periodismo ya no es lo que era. Este ha evolucionado tanto que ya se parece muy poco al primer periódico que apareció en nuestro país hace ya algunos siglos atrás. Todos estos cambios han ido introduciendo mejoras en los medios de comunicación y también en las rutinas productivas de los periodistas. Parece que realizar un producto periodístico es ahora más fácil, y sí lo es, pero también implica el tener que incorporar nuevas herramientas, nuevos soportes que ayuden al lector o a la audiencia a comprender mejor la información.
Atrás quedaron ya los tiempos en los que al periodista le bastaba con copiar y pegar el teletipo de turno para poder realizar un trabajo decente. Hoy en día esto se sigue haciendo en algunos sitios, pero si realmente el medio de comunicación quiere tener cierta calidad, este tiene que ir más allá. El periodista ya no puede ser un simple informador, ahora tiene (o tenemos) que asumir un nuevo papel en la sociedad y en la era de la información.
Julio Alonso destaca en su blog alguno de estos nuevos papeles del periodista en la era de lo digital. Autenticador, generador de sentido, navegante y animador de la conversación son sólo algunos de los puntos en los que el periodista debe trabajar, pero estos no son lo únicos.
El periodista ha de ser un todoterreno y para ello a de saber utilizar todos los mecanismos que actualmente nos ofrecen las nuevas tecnologías. No debemos quedarnos en la superficie, siempre hay que buscar ese plus añadido que nos diferencie del resto y que nos haga un poquito mejores.
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