Mostrando entradas con la etiqueta Toronto. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Toronto. Mostrar todas las entradas

martes, 28 de octubre de 2008

Pararrayos


"Los pararrayos no sirven cuando hay tormenta, dentro de mi cabeza"

martes, 14 de octubre de 2008

Toronto-entero

Se acabó. Después de tres semanas en una ciudad y un país increíbles vuelvo a pisar tierra nacional y la realidad, esa de la que he intentado huir, pero que ya me ha alcanzado.

De Torontoentero (como dicen mis amigos) podría contar miles de cosas, tantas como para poder poner los dientes largos a más de uno. No exagero cuando digo que he estado en el sitio más bonito de mi vida, rodeada de naturaleza, respirando aire puro y aprendiendo a remar en canoa como los antiguos nativos.
Las cataratas del Niagara no decepcionarían sino fuera por su alrededor. En lugar de estar sumergida dentro de la naturaleza, están rodeadas por casinos y grandes rascacielos, un paraíso para algunos turistas. Pese a todo siguen siendo una maravilla que lucha diariamente por no ser destruidas por el hombre.

En French Canada se puede descubrir un país totalmente diferente. Francia e Inglaterra juntas a miles de kilómetros de distancia. Sus calles, sus monumentos, hasta su clima se parece a la del viejo continente.

Y Toronto...donde además de convivir grandes rascacielos con ardillas adorables, también lo hacen millones de personas, cada una más diferente de la de al lado. Allí la diferencia no se mira, se admira. A nadie le importa que tres niños de diferentes razas estén cogidos de la mano, ni que te puedas encontrar a una persona que es oriental y afroamericana al mismo tiempo. Todos son canadienses.

Y sí, he aprendido inglés. Si quieres comunicarte no te queda otro remedio. Brasileños, koreanos, japoneses, búlgaros, alemanes, franceses, italianos...y algunos españoles...Todos quedarán en mi recuerdo junto a Canadá, un país al que me gustaría volver.

sábado, 30 de agosto de 2008

Recién licenciada busca...


Fin de agosto. Para muchos significa el fin también de las vacaciones, pero para mí es simplemente el comienzo, de eso y de mi nueva vida.

Fin de EFE, donde he estado estos dos últimos meses, aprendiendo mucho de los profesionales que trabajan allí y de mis compañeras becarias.

Decenas, o tal vez cientos de notas de prensa, llamadas telefónicas y ruedas de prensa donde siempre me encontraba a alguien con quien hablar y compartir una empanadilla, una fruta, un vaso de agua o simplemente, el siempre agradecido chorro de aire acondicionado.

En estos dos meses me he vuelto experta en sanidad, yo que me mareo en los hospitales, he descubierto qué profesiones son las más calurosas, he disfrutado de los “apasionantes” debates en el pleno de la Diputación de Alicante y me he ido de excursión con Camps a ver los “magníficos” agujeros del TRAM

Y ahora, dentro de tan sólo dos semanas me espera Torontoo yo la espero a ella. Esta es mi casa donde voy a vivir con Mary y Peter Kiriakidis (parece griego) y sus tres hijos. Antes subiré a dos aviones, aunque tal y como están las cosas, no sé si llegaré a tiempo…¡esperemos que sí!

Por Toronto he renunciado a un trabajo de un año entero en EFE. Yo ya tenía los billetes comprados, ellos no podían esperar tres semanas (allí también se nota la crisis). El 98% de la gente a la que se lo cuento me mira con cara rara, ellos hubieran elegido sin duda EFE. La verdad es que para una recién licenciada como yo no podía haber oferta mejor…pero yo soy así, a la primera de cambio y ya estoy rechazando ofertas.

Tal vez me arrepienta cuando vuelva el 5 de octubre y me encuentre solamente con el recuerdo de Toronto y poco más. Pero como dice una amiga, tal vez no fuera mi destino…Ya está la decisión tomada y ya no hay vuelta atrás.

Y este ha sido mi verano. Ahora dejo un mensaje para todo aquel que le interese:

RECIÉN LICENCIADA EN PERIODISMO BUSCA TRABAJO A PARTIR DE OCTUBRE

Y ahora...sólo me toca ser feliz